Reflexionando la realidad a la luz de Monseñor Romero - 22

337. Llamado a la oligarquía

Es difícil estar hablando más claro de lo que hizo Monseñor Romero.  Pidió a la oligarquía (los poderosos económicos del país) que reflexionen el llamamiento de Cristo “Ay de ustedes porque mañana llorarán” y lo traduce como: “quitarse los anillos antes que les puedan cortar la mano”.  Monseñor pide que sean “lógicos” con sus convicciones humanas y cristianas. Quizás ahí Monseñor Romero ha sido muy idealista y se ha equivocado:  los poderosos no  tienen convicciones humanas y aún menos cristianas. Sus dioses no tienen nada que ver con el Dios de Jesús, con el Dios de los pobres, con el Dios de la liberación.  Monseñor les pide que no defiendan lo que indefendible y exige que den al pueblo chance a organizarse con un sentido de justicia. 

Creo que la clase política del país ha hecho de las elecciones su principal preocupación.  Los lujos y los grandes beneficios de estar en puestos clave del estado paralizan a quienes caen en las trampas.   Ganar las elecciones es importante para garantizar los beneficios.  En los discursos hacen referencia al pueblo, a las necesidades del pueblo, pero en la práctica no trabajan la formación política, ni la organización del pueblo.

Estamos ante los retos de defender el aumento importante en los salarios mínimos.  Es un paso muy importante sobre todo en las maquilas y en los trabajos agrícolas, donde la explotación es un verdadero espanto.  Los ricos y poderosos harán todo lo posible para deshacer esa decisión política.  ¿El pueblo tomará conciencia? ¿El pueblo se levantará para exigir el cumplimiento?   Son grandes retos.

338. Organicemos la conversión de los corazones

 Monseñor Romero considera que la conversión del corazón es condición para que hay conversión de una sociedad tan injustamente organizada.  No opten por soluciones inmediatas, sino busquen “la conversión del corazón”.   Menciona la exigencia de “vivir la austeridad del desierto”.  Cuando se oye los resultados de investigaciones acerca de enriquecimiento ilícito durante los últimos 30 años… realmente da escalofrío!  Cuan lejos están los magistrados y los parlamentarios de una vida en austeridad. Cuan fácil se oye que fulano/a está de viaje con todos sus gastos (amplios) pagados.  Luego dice Monseñor: que sepan saborear la redención fuerte de la cruz.  Ahí sí andamos muy mal el día de hoy.  En los tiempos de Romero una enorme cantidad de hombres y mujeres tomaba conciencia de su responsabilidad histórica y estaba dispuesta a abrazar la cruz por la liberación del pueblo de la dictadura y de la explotación.   Hoy la redención de la cruz volvió a ser un asunto religioso e intra eclesial.   En tercer lugar Monseñor recuerda que debemos vivir la alegría de ganarse el pan con el sudor de la frente, pero a la vez denuncia como “diabólico” el quitarle el pan al que tiene hambre.  

Si el salario pagado no cubre ni en lo mínimo las necesidades básicas de alimentación, vestimento, calzado, vivienda, salud, educación, recreación y descanso,…. Entonces el sistema que facilita y legitima ese salario es realmente diabólico: Enriquece a los empresarios gracias a la miseria de sus trabajadores/as más pobres. 

339. ¡Ay de los poderosos!

a un mes de su asesinato, Monseñor Romero, denuncia los idólatras del poder y del dinero que ofrecen a sus dioses tantas vidas, tanta sangre del pueblo. “Dios se lo va a cobrar bien caro a esos idólatras del poder” Cuando se tortura, se mata y se masacra al pueblo para que se subyugue al poder, se está violando lo más sagrado.    Los años de represión cruel (como lo conocía Monseñor Romero) y luego lo espantoso de la guerra, han sangrado al pueblo salvadoreño.   Cuando las relaciones entre los poderes político militares estaban en crisis y una solución dialogada era la única salida, los poderosos del país cedieron en lo político, en lo militar, pero no en lo económico. Es decir, que – costara lo que costara – este sistema capitalista neoliberal no podía ser modificado para nada.  Los poderosos (gracias a sus riquezas obtenidas desde sistemas de explotación del trabajo de otros) ganaron: terminó la guerra, pero las causas de la guerra (la injusticia) quedaron “salvadas”.  Y aún hoy, en este segundo gobierno del fmln seguimos con el sistema capitalista neoliberal nefasto…”ay de los poderosos”.

340. El Dios de todos los pueblos

“Y el Dios de todos los pueblos, también el Dios de El Salvador, tiene que ser un Dios así: Que va iluminando también la política. El es el que nos da nuestros campos; El es el que quiere la transformación agraria; El es el que quiere un reparto más justo de los bienes que El Salvador produce. No es justo que unos lo amalgamen en sus arcas y el pueblo se quede sin esos dones de Dios que ha dado para el pueblo,”

Exactamente a un mes de su asesinato, Monseñor Romero denuncia nuevamente la estructura injusta de la sociedad salvadoreña donde unos pocos acaparan los bienes que producimos, mientras las mayorías sin quedan “sin esos dones de Dios”.   Monseñor está consciente que el Dios de la vida ofrece vida a todos y todas.  La Palabra del Dios de la Vida debe iluminar toda la vida, también la política!!!   Cuando el profeta o la profetisa habla, le acusan de hacer “política”, y le recuerdan que debe limitarse a lo religioso.  Esto es exactamente lo nuevo del Dios del pueblo hebreo y de Jesús: Este Dios ilumina (es decir descubre también las oscuridades) también la realidad política, económica, social, cultural,….  Claro, los poderosos (políticos, económicos, sociales, culturales) no quieren que alguien (y aún menos en nombre del Dios de la Vida) se meta en sus asuntos oscuros. Pero no es porque ellos no quieren, que no se debe hacerlo.   

Acabamos de celebrar la Navidad: la fiesta de la humanización / encarnación de este Dios de la vida en la realidad humana e histórica, asumiendo todas las dimensiones de esta vida.  Lo que sucedió hace más de 2000 años es la pauta para encontrarnos con el Dios de la vida también hoy.  

341. Antesala del Reino de Dios

Monseñor desea que El Salvador sea una patria donde Cristo está entrañado en la familia, en las leyes, en el gobierno en “todo aquello que es mi patria”.  Que Cristo sea la luz que ilumine todo, para que la sociedad salvadoreña sea la antesala del Reino de Dios…..  Tan lejos de la realidad del tiempo de Romero, como de ahora.  Sin embargo Monseñor Romero no deja de recordar nuestra misión de construir un proyecto de nación de manera diferente, un proyecto inspirado en el Dios de la Vida y que lleve a creer en Cristo.  Llama la atención a no querer construir una patria inspirada en el diablo!!!!   ¿Cuáles son las fuerzas diabólicas que hoy están destruyendo nuestro país?

Muchas veces los políticos utilizan (abusan de) el nombre de Dios para justificarse y para hacer creer a la gente que andan por buenos caminos y que tienen buenas intenciones.   No es cuestión de hablar de Dios, sino de trabajar para que esta patria sea “antesala del Reino”, para que no haya pobres (empobrecidos/as) entre nosotros, que no haya exclusión de nadie, que se comparta de manera justa y equitativa la riqueza producida, que hay salud, educación, vivienda, trabajo, salarios dignos,… para todos y todas…. 

342. La oligarquía

Monseñor pone el dedo en la llaga:  cuando la oligarquía siente que está perdiendo su poder absoluto, empieza a defender sus intereses egoístas con lo que único que tiene: dinero, que le permite comprar armas y pagar mercenarios que están masacrando al pueblo y ahogando toda la legítima expresión que clama justicia y libertad.  Monseñor hace esta reflexión en su homilía después del atentado de la radio YSAX.  Sin embargo, si vemos la realidad de hoy… no estamos tan lejos de lo mismo.   ¿De dónde provienen las armas que circulan tanto en El Salvador?  ¿Quiénes se hacen ricos con el negocio de las armas, el negocio de las agencias privadas de seguridad?  Hoy el pueblo tampoco tiene posibilidades para su legítima expresión que clama justicia y libertad.   Por el aumento del salario mínimo legal y obligatorio, los grandes empresarios (especialmente en la agro industria) brincan. ¿Qué estarán tramando?  Los partidos de la derecha ya han bloqueado la aprobación del presupuesto del estado para el año 2017.   La sala de lo constitucional de la Corte Suprema de Justicia está cada vez más agresiva en su defensa de los intereses particulares de los grandes en este país.  Con dinero quieren seguir “defendiendo” sus intereses egoístas. Nunca han tenido y no tiene visión de país, de nación. 

Sin embargo saben “vender” sus proyectos, bombardean a través de sus poderosos medios de comunicación y logran imponerse en la conciencia del pueblo que se lanza a la calle (por ejemplo) a defender el escalafón de los que ganan salarios más altos, que vota por partidos de la derecha (que así logra mayoría en la asamblea),….

343. La voz de la justicia nadie la puede matar ya

Siempre a un (exactamente) un mes de su asesinato Monseñor Romero comunicó a su pueblo que había recibido la noticia que está en la lista de los que serán eliminados la otra semana.  A pesar de esas amenazas Monseñor no dejaba de expresar su voz profética: no endurezcan sus corazones, conviértanse, compartan lo que son y lo que tienen, no sigan reprimiendo al pueblo, no sigan matando, no sigan callando la voz de los que luchan por una “justa distribución del poder y de la riqueza en nuestro país”. 

“La voz de la justicia nadie la puede matar ya”   Sin embargo a 25 años de los Acuerdos de Paz, a casi 37 años del asesinato de Monseñor Romero, la voz de la justicia sigue siendo una voz “en el desierto”… y aún lejos de la realidad de hoy.  La brecha entre los que tienen poder y riqueza y aquellos que no lo tienen, sigue creciendo, sigue siendo una denuncia fuerte.  La voz divina de la justicia seguirá clamando, pero hoy en El Salvador, no se oye muy fuerte. Las iglesias no se unen en una sola voz exigiendo junto al pueblo justicia, libertad, verdad, solidaridad, vida, reconciliación, misericordia,…   Hoy se puede andar estampitas con la imagen oficial del beato Romero (hasta con una reliquia incluida!!!), se puede andar en procesiones para recibir las reliquias del pronto Santo, sin asumir sus causas, sin ser la voz de la justicia que nadie puede matar ya.