Lo que les comparto es una propuesta que les puede ayudar a celebrar Semana Santa en el contexto de esta cuarentena o cautiverio, que nos sorprende a todos, confinados en nuestras casas, y sin poder encontrarnos como comunidad
Los cristianos lo que hacemos cada Semana Santa es celebrar no recordar. La gran diferencia que recordar es, que nos acordamos de un hecho del pasado y se mira como algo que ocurrió. La celebración es que a partir de algo que ocurrió. Un hecho histórico, nosotros decimos que sigue pasando y aquí ahora queremos asumirlo, para que logremos aprender a vivir con mayor dignidad junto con otros.
Esto es una instancia provocadora para la conversación, reflexión. No pretende otra cosa. Lo he reflexionado en mi casa, en el silencio. Teniendo como telón de fondo la partida de nuestro Hermano de camino Mariano Puga, y tantos y tantas que nos hemos quedado “entre Tongoy y los Vilos”. Después de una gran pérdida y un gran legado, urgidos a cuidarnos en nuestras casas, sin poder vernos ni abrazarnos.
Tengo la certeza que a algunos les gustará y a otros no. A algunos les servirá y a otros no. Siéntanse libres es sólo una propuesta, por si acaso.
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