
El Salvador es un país chiquito, tan chiquito que se puede colocar holgadamente dentro de la provincia de Badajoz. Está en la cintura de América, es decir, sostiene el peso de América del Norte, estabiliza el continente y reparte el peso hacia América del Sur para que pueda andar. La cintura de América está dañada; quizá por eso una parte de América del Norte anda desnortada y otra parte de América del Sur no camina correctamente.
Desde hace mucho tiempo, El Salvador y sus gentes han sido maltratadas. Por ejemplo, en 1932, hubo un levantamiento indígena y campesino porque sus condiciones de vida eran cada vez más miserables. Ante ello, el militar golpista, Maximiliano Hernández Martínez asesinó a unas 30.000 personas.
Entre 1980 y 1992 otras 75.000 murieron, y 8.000 “desaparecieron” en una guerra por las mismas causas.
En 2019, Nayib Bukele llegó inicialmente de manera democrática al poder, y fue reelegido fraudulentamente en 2024. Este señor ha conseguido vaciar de contenido la democracia...