El Consejo Misionero Indígena (CIMI) repudia públicamente las medidas adoptadas y las denuncia como parte de una actuación articulada por los empresarios rurales, mineros y madereros con el objetivo de entregar tierras a empresas privadas en el país y en el extranjero e imposibilitar nuevas demarcaciones de tierras tradicionales.
Según CIMI, el nuevo gobierno electo pretende gestionar el país en base a propósitos que buscan descalificar los derechos individuales y colectivos de las comunidades y pueblos tradicionales, atacar a los líderes que luchan por los derechos, amenazar y criminalizar a los defensores del medio ambiente, indigenistas, entidades y organizaciones de la sociedad civil, es decir, a todos aquellos que se oponen al proyecto de explotación indiscriminada de la tierra y los recursos existentes en ellos.
- Comunicado completo en: https://cimi.org.br 2019/01/04
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