Carta Circular 119
Estamos viendo constantemente que las empresas, sobre todo las trasnacionales, cometen abusos contra los derechos humanos. En realidad las trasnacionales tienen derechos pero no obligaciones. Las políticas públicas así lo permiten. La impunidad reina por todos lados. No es fácil para los estados, si quisieran, controlar la situación al respecto. Pues existen oscuras redes de inversión que dificultan la rendición de cuentas de actores involucrados.