Asesinaron al obispo, pero no pudieron matar la verdad
Era el 24 de abril de 1998. El obispo Juan Gerardi acababa de hacer la presentación oficial del proyecto de la Recuperación de la Memoria Histórica en la Catedral de Guatemala en presencia de miles de creyentes, de la Conferencia Episcopal, del cuerpo diplomático y los familiares de las víctimas de la guerra.